Memoria de la Historia

Sobre el origen de la palabra "Hispanidad".

«Covadonga es la casa solariega de España y la Hispanidad». La primera vez que aparece escrita la palabra "Hispanidad".


Publicado en el número 66 de la revista Altar Mayor, de mayo-junio de 2000. Ver portada de Altar Mayor en La Razón de la Proa (LRP). Recogido recientemente por la revista Desde la Puerta del Sol, de 12 de octubre de 2021. Ver portada de Desde la Puerta del Sol en LRP.

Sobre el origen de la palabra «Hispanidad»


Hace poco más de un año en una revista escribía un artículo sobre el origen de la palabra Hispanidad. En el citado artículo hacía un poco de historia de cuándo y en dónde se había pronunciado por primera vez dicho vocablo, llegando a la conclusión de que mientras no se pudiera demostrar lo contrario, el origen o el primero que la había acuñado había sido el obispo asturiano fray Ramón Martínez Vigil cuando en la inauguración de la Basílica de Covadonga –hecho que ocurrió en el mes de septiembre de 1901–, en su discurso diría entre otras cosas: «Covadonga es la casa solariega de España y la Hispanidad».

Esta frase fue grabada posteriormente en una placa que los responsables del histórico Santuario de Covadonga y solar de la Reconquista colocaron dentro de la basílica, algo que todos los peregrinos pudieron contemplar durante varios años. Pero no se sabe ni cómo ni cuándo desapareció la placa y con ella lógicamente la inscripción, quedando entonces la frase solamente en la memoria de algunas personas. En mi artículo daba el nombre de dos de ellas: el teólogo fray Maximiliano García Cordero, fraile dominico, y el del filósofo Gustavo Bueno. En este sentido reproducía solamente la frase que me repitió el dominico y que era: «Covadonga es la casa solariega de la Hispanidad». El maestro de la Orden de Predicadores no se había equivocado tanto ya que citaba la frase de memoria y después de tantos años era natural que no la recordara con total exactitud. Pero nuevamente, y acompañada por otras frases dedicadas a Covadonga por otros ilustres personajes, han vuelto a colocar, ahora en el pórtico de la basílica y a modo de decálogo, la frase que he citado: «Covadonga es la casa solariega de España y la Hispanidad», atribuida a fray Martínez Vigil como así figura al pie de la misma. La última frase recogida en el decálogo, que ahora se expone, corresponde a la pronunciada por Juan Pablo II:

«Covadonga es una de las primeras piedras de una Europa cuyas raíces cristianas ahondan en su historia y en su cultura. El reino cristiano nacido de estas montañas puso en movimiento una manera de vivir y de expresar la existencia bajo la inspiración del Evangelio».

Tampoco faltan frases atribuidas a Sánchez Albornoz, Menéndez Pidal, Juan XXIII, Máximo de la Vega, Guillermo Muñoz Goyanes, etc.

Pero ahora, con gran asombro por mi parte ya que en mi anterior artículo, como he dicho, ponía de testigo a Gustavo Bueno como una de las personas que habían leído la inscripción de la placa primitiva, veo que en el libro que acaba de publicar el filósofo, olvidó nombrar al obispo Martínez Vigil, pero no olvidó mencionar a otro obispo, Zacarías de Vizcarra –citado también por mí–, para terminar escribiendo Bueno: «...sin embargo, el término "hispanidad" fue acuñada por Unamuno en 1909».

Me faltó tiempo para llamarle por teléfono, dada mi amistad con él, para decirle solamente que me había sorprendido una enormidad lo que sobre el vocablo Hispanidad había escrito en su libro, puesto que por conducto de su hijo Gustavo a mí me había llegado la historia de la placa y que en base a ese mismo testimonio, más el del fraile dominico, había escrito un artículo donde dejaba muy claro que el primero en acuñar esa palabra había sido Martínez Vigil en la inauguración de la Basílica de Covadonga en 1901. Después de escucharme atentamente el sorprendido parecía ser ahora el filósofo, quien llegó a contestarme: «Es cierto, el no haber citado a Martínez Vigil fue debido, más bien, a un lapsus».

Aunque para mayor seguridad y certeza de las cosas hay que decir que en un artículo que publicó en la revista de filosofía, ciencias humanas, teoría de la ciencia y de la cultura, El Basilisco –dirigida por el propio Gustavo Bueno–, Jorge Lombardero –citado también por mí– atribuye también a fray Ramón Martínez Vigil el haberla pronunciado antes que Miguel de Unamuno.

Así pues, queda bastante claro quién ha sido la primera persona que acuñó la palabra Hispanidad, palabra que más tarde dio origen para que el Día de la Raza fuera llamado Día de la Hispanidad. En este sentido, es Ramiro de Maeztu quien recoge el titular de un artículo publicado por el obispo Zacarías de Vizcarra, también citado por mí en mi artículo anterior: «El 12 de octubre, mal titulado el Día de la Raza, deberá ser en lo sucesivo el Día de la Hispanidad».

De nuevo este cambio de nombre Ramiro de Maeztu se lo quiere atribuir al obispo Zacarías de Vizcarra, lo mismo que hizo con el vocablo Hispanidad; pero el periódico de Oviedo, Región, en su edición del día 12 de octubre de 1947, titulaba así un artículo: «El ovetense D. José María González, creador de la fiesta de la Hispanidad». Aunque ciertamente esto no parece querer decir que fuera precisamente José María González el promotor del cambio de nombre, sí conviene recoger lo que sobre el particular éste ha dejado escrito:

«En 1939, la Real Academia Hispanoamericana de Cádiz, pidió a los Gobiernos de España e Hispanoamérica que cambiaran el apelativo de "Fiesta de la Raza" por el de "Fiesta de la Hispanidad", y posteriormente, el Instituto de Cultura Hispánica del Rosario de Santa Fe (República Argentina), informó a la prensa de Madrid que en su seno se había presentado una moción para solicitar de los poderes ejecutivos de la Nación que el día 12 de Octubre sea considerado como el "Día de la Hispanidad", en lugar del "Día de la Raza". Nada hizo el Gobierno argentino sobre esa petición, y en España tampoco se revocó la ley de la "Fiesta de la Raza"; pero desde hace unos años se vienen usando los dos conceptos indistintamente en la conmemoración del 12 de octubre en España y en las naciones hispanoamericanas».